viernes, 28 de febrero de 2014

POLÍGONO DE SAN PABLO EL DÍA DE ANDALUCÍA Y DOS HAIKUS




 Un bloque del Polígono con su ropa tendía. Foto de L.M.

La sombra vacía.

Frío azul

en la acera de invierno.


1- Esquivo los charcos

para no pisar 

el reflejo de las camisas 

tendidas.


2- Sin afeitar, un par de hombres

fuman asomados a la ventana

mirando sin mirada. 


3- En la acera, un viejo escupe 

sin voluntad de dañarme

aunque me daña.


4- A las puertas de la asociación de vecinos,

hincadas en la tierra junto a los tiestos de geranios,

las dos banderas de las grandes ocasiones

flanquean la entrada 

sin despertar entusiasmo.

¡El entusiasmo lleva dormido tanto tiempo!


5- Saltando desde lo alto de cinco ventanas,

el maternal aroma de las lentejas

se arroja a mis brazos.


6- Nadie parece tener interés

en este gris día de fiesta

salvo los niños.


7-Silba en mi oído un pitido de olla exprés

adormecedor, como el oleaje.


8- Dos mujeres pasean a sus viejos perros

sin desviarse de su camino.

(Los cuatro lo harían a ciegas).


9- A lo lejos,

petardos sin estrellas

recuerdan a los vecinos

las rayas blancas y verdes

de este último día de febrero.


10- Escucho hacia dentro

los explosivos besos de esa abuela

que otrora se comió el hambre de la posguerra, 

¡qué guapos sus nietos repeinados!


11- Mi corazón cabe en mi puño.


12- En el bar sin nombre

se acumulan los cercos de los vasos

de aquellos que madrugaron para beber.


13- Solo Tobi está atento a mi paso rápido,

su mirada siempre alerta

vigilando su esquina. 

Bendito perro proletario.



Alma rota de San Pablo.

La mía se queda 

pegada a tu costado.


1 comentario: